Epi y Blas se quieren. A nadie le puede pillar de sorpresa el hecho ya que tienen muchos puntos comunes.
Han firmado un acuerdo de convivencia. Ahora hacen todo juntos, bueno, supongo que todo no (al baño imagino que irán por separado).
Hay amor.
Como en toda relación uno da más que otro. Blas está entregado y asume los desaires públicos y contradicciones que Epi efectúa relativo a lo estipulado en sus capitulaciones matrimoniales.
Triki está despechado. Creía que al final se llevaría a la cama a Blas (que parecía más de sus gustos) pero no, la naturaleza es sabia.
Pensaba que se iba a comer el mundo y tendrá que esperar para saber si da un mordisco, se lo come entero o hace un ridículo espantoso provocado por su soberbia y petulancia (además de medir mal los tiempos y las opiniones).
A Triki le gustan mucho las fotos y los titulares y se pierde en gilipolleces.
A muchos nos gusta más el Baby-Triki.
Coco tiene todo para quedarse sin nada. La opción de formar una cómuna amorosa con Triki y Blas (entre otros) se disipa. Para conseguir sus "cosas" tiene que trabajar cuatro veces los que los otros porque las reglas del juego le perjudican.
Sigue siendo el que tiene más cara de buenazo pero menos poder de actuación en esto de las relaciones.
Gustavo quería ser otra vez el puto amo pero no ha podido. Es fuerte. Buscó el amor de Blas pero éste (de momento) le niega en público y se refugia en los brazos de Epi, que está demostrando ser el más listo además de ser el mejor asesorado y apoyado.
Epi critica a Gustavo, dice que todos los problemas son él, y querrá un matrimonio con Peggy que aunque es como Gustavo, en ideales, le sirve para justificarse ante los vecinos chafarderos.
La idea sibilina de Epi es formar un matrimonio a tres con Blas o uno de los suyos (que se cree que será el que primero pase sus noches con Epi pero que no será así) y con gente cercana a Gustavo, preferiblemente Peggy.
Por querer, Epi, querría ser el que cabeza visible de esa relación a tres tan natural y coherente. Seguramente tengan que ir a Londres.
Y aparece Abby Cadabby desde el Sur. Ha permanecido escondida y sabe que su momento llegará. Ella sabe que hay una posibilidad de compartir cama con Epi y Peggy. Es decir, serían las mismas cartas amorosas repartidas de diferente forma pero al fin y al cabo el ganador sería el macho alpha de Epi y Blas se iría con Gustavo a un crucero por las islas griegas.
Todos estos mencionados en este último párrafo tienen algo en común: son creados y manejados por Henson, que tiene 35 amigos detrás que nunca permitirán que Blas tenga una relación duradera con Triki y Coco.
Es momento de cambiar de canal porque está todo vendido. El amor a primera visa ha triunfado y no es antinatura, como algunos creen, es lo esperado cuando los sentimientos tienen un precio.
6 comentarios:
jajjajajajja, nunca dieron tanto de sí estos personajes hasta tu entrada, me troncho con tu humor.
BEsos
;) Tengo mis momentos. Un beso, Esther.
Siempre queda lo bueno, cuando los sentimientos no tienen precio
Cariños
En ciertas esferas todo tiene un precio. Cariños.
Hola: Epi y Blas son todo un clásico de mi generación. Crecimos con ellos y sus diálogos. Me gustó mucho tu ironía. Acabo de descubrir tu blog y me gusta mucho la variedad de temas que tratas. En este momento tengo un blog dedicado a los jóvenes y Educación que te invito a visitarlo: http://cativodixital.blogspot.com.es/ . Si quieres seguimos en contacto. Yo ya me hice seguidora de tu blog.
Tienes un blog muy interesante y didáctico, Marta. Enhorabuena.
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