Nací en 1469, en Huelva. Fuí siempre un tipo fuerte y arriesgado. Me colé de polizón en una carabela rumbo a las Indias...
Acabe en lo que ahora llamamos América..me casé con una indígena llamada Maguy a los 38, tuve 3 hijos y una hija...(desde ese momento me viene mi atracción por la actual Sudamérica)
Cuando me dí cuenta de lo que estabamos haciendo allí me uní al pueblo oprimido en contra de los "conquistadores libertadores europeos"...tuve mi muerte a los 47 en plena lucha contra un caballero español que llevaba una cruz en una mano y la espada en la otra mano..
Volví a nacer en el 1674 en Toledo. Fui hijo de madre soltera y padre judío. Enseguida me hice hábil usuario de los aceros a la hora de ejercer de pendenciero.
Tuve muchas amantes, ningún hijo reconocido y vendí mi alma al diablo varias veces...siempre a precio de saldo..
Me enamoré de la mujer equivocada, cuyo marido no consentia ser cornudo...y tampoco apaleado...
El y otros 5 tipos de muy baja moral me dieron muerte en una calle de Segovia cuando no tenía ni la edad de Cristo.
Mi siguiente parto fue en Valladolid, hace unos 35 años....
Sigo siendo fan de Sudamérica y pendenciero...amante ocasional y limitado en la suerte del vivir del aire...
En estos días sobrevivo con mi ünica espada..la palabra
3 comentarios:
Buena memoria la tuya, pero creo que te falta un nacimiento, no sin otro trágico final aunque está vez sin la ayuda de nadie, ¿no es así?, Quique.
Hay unos temas parapsicológicos que no quiero tratar de momento...la clientela no está preparada para esos excesos....
¡Rediós! El claro ejemplo de la reencarnación. O algo así.
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