lunes, 12 de septiembre de 2016

SEXO Y ADIÓS



He conocido en mi vida a muchas personas que piensan que sexo se puede tener con mucha gente pero que dormir juntos eso ya es algo muy íntimo y no se puede hacer con cualquiera.

Yo antes creía que si follabas y te ibas (o se iba) eras un egoísta, que el pack completo era amanecer abrazados. Lo creía pero no lo ejercía. Hasta bien mayorcito no he cumplido con esa premisa moral, por otra parte satisfactoria en la mayoría de los casos.
Eso de no saber como ponerte para no molestar, de contener gases, de ver caras al amanecer sin retocar, de los arañazos con las uñas de los pies, de los calores por abrazos en pleno verano, de dejar hueco para que duerma el Dóberman, lo de la tele encendida o apagada...eso es complicado de manejar con extraños. Salvo que tengas tal borrachera que te la sude todo y estéis en estado catatónico los dos hasta las tres de la tarde. Casi es preferible esta situación si la misma no desemboca en diarrea o similares.

Pero no, señores, no son las cosas tan fáciles. Ahora me comentan que lo suyo es no implicarse salvo con quien quieres mantener algo, así que lo suyo vuelve a ser eso de "gracias por tus fluidos, nos vemos si eso".
Me vuelvo loco, intento comprender a todos pero me cuesta. Es como intentar empatizar con Willy Toledo.

Es por eso que apoyo la moción de hacerlo en casas ajenas y no en hoteles. Al no ser tu casa puedes irte cuando quieras, si quieres irte. En un hotel tienes que aguantar por paripé estúpido en ocasiones. Aunque por otro lado los hoteles cada vez me parecen más fríos y me motivan menos así que no los tengo mucho aprecio.
Lo de la casa, si es la tuya, conlleva cierta mano izquierda para que pillen la indirecta de que quieres dormir solo. Leves empujones hacia un costado, poner la Santa misa en la tele a todo trapo, pasar la aspiradora y hacer que venga tu madre a traerte croquetas puede servir de motivador para que te dejen solo. También está la opción de hablarlo, pero te enfrentas a la posibilidad de no ser comprendido.

- ¿Me estás diciendo que solo soy un polvo para ti?
- No, mujer, podemos ser más de uno. Pero es que no puedo comprometerme en este estado vital de mi supervivencia. Vivo sumergido en el caos que me propicia mi existencialismo y mi negación del ser como norma genérica.
- Yo quiero que seamos amigos con sexo, no te enrolles. Por cierto, ¿huele a croquetas?
- No, no creo, ¿croquetas? ¿Qué madre?

Yo recomiendo ser honestos siempre (con nosotros y con los demás). Hay que amar sin dañar y a ser posible amar mucho, empezando por nosotros mismos.
Parece que estoy haciendo un alegato a favor de ser amigo de Onán, y también puede ser así, pero me refiero a que para que no tengamos problemas en dormir solos o acompañados lo primero es estar contentos con nosotros, no arrastrar taras de relaciones pasadas y estar dispuestos a disfrutar de lo que venga sin vetos ni líneas rojas. Si no podemos compartir lo mejor será que no lo intentemos, las secuelas emocionales a veces son grandes.

- ¿En tu casa o en la mía?
- En la que quieras pero SIN Bertín Osborne.





5 comentarios:

lacantudo dijo...

Aquellos que hicimos el master de "Perfecto anfitrión", nos desvivimos en que al despertar tras el sueño reparador al que siempre precede una noche de sexo, la mujer que ha ocupado la parcela en alquiler de nuestra cama, tenga el desayuno perfecto. A ser posible continental y con servilleta de hilo (a juego con su tanga).
Muchas noches he cometido la torpeza de intercalar entre las palabras de seducción, preguntas como ¿Nesquek o Cola Cao? ¿Leche entera o semi? ¿Mantequilla o margarina? y claro... eso confunde y alguna me ha tomado por un pervertido juguetón.

CARLOS DEL B. IGLESIAS dijo...

Yo no tengo dudas, eres un juguetón. ;)

lacantudo dijo...

Que bien me conoces, truhan.

Hudith Zelaya dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
CARLOS DEL B. IGLESIAS dijo...

Hudith, mis posts son aplicables a todos los géneros. Cada cual sabe lo que es perder el tiempo o no. :)